Pannacotta de fresas {Asaltablogs}

Último domingo de mes. ¿Y qué ocurre siempre este día? Que nos vamos de asalto.

Nuestra víctima en esta ocasión, a quien hemos desvalijado la cocina por completo hasta dejar su recetario limpio, ha sido Libia de Tartis y más. Incluso hemos sentido la tentación de llevarnos a su preciosa hurona Laguna que es una monada. Como cada comienzo de mes, y después de averiguar el blog al que tendríamos que robar, me puse a ojear con detenimiento las recetas en busca de cual quería preparar. Me llamaron mucho la atención pero yo tengo perdición por las fresas y esta receta me entró por los ojos nada más verla. Y tengo la sensación que no seré la única porque de verdad que tiene una pintaza…

La pannacotta es un postre tradicional italiano, en concreto se dice que de la zona de Piamonte, elaborado a base de nata cocina. En sus orígenes los únicos ingredientes que componían la panna cotta eran la nata, el azúcar y la gelatina. Pero con el tiempo y como todo, se ha ido renovando e introduciendo nuevos ingredientes hasta tener una infinidad de sabores y combinaciones donde escoger.

Hace tiempo preparé una receta de Panna cotta de vainilla y frambuesas. Está que os traigo es ideal para esta estación en la que las fresas está en pleno apogeo.

INGREDIENTES (9 pannacottas pequeñas):

- 500 ml nata montar
- 250 ml leche
- 250 g fresas
- 4 cucharadas azúcar glasé
- 4 hojas gelatina neutra



PREPARACIÓN:

1. Ponemos las hojas de gelatina en remojo en agua fría durante 5-10 minutos, hasta que se ablanden.

2. Vertemos en un cazo la nata para montar junto con la leche y el azúcar y dejamos cocer retirando del fuego antes de que rompa a hervir. Añadimos la gelatina y mezclamos bien para que se integre.

3. Limpiamos las fresas, las troceamos y trituramos con la batidora hasta obtener un puré. Si queremos que quede liso podemos pasar por un colador para eliminar las pepitas.

4. Mezclamos el puré con la crema anterior hasta integrar todo bien y vertemos nuestra mezcla en los vasitos escogidos. Dejamos toda la noche en la nevera y servimos.

Fuente: Tartis y más